La Documentoscopia Digital es casi más un arte que una técnica. Tiene como finalidad el estudio de documentos modernos, de tal forma que se acredite su autenticidad o su falsedad. Un documento dubitado (aquel del que se duda sobre su autenticidad y/o autoría), tanto en documentos privados, como en públicos.
Analizamos todo tipo de documentos y evaluamos la procedencia de impresión, el cotejamiento con otros similares (tipo de papel, fibras, color, impacto de la impresión sobre el documento, etc.), para acreditar la falsedad, o no, de dicha prueba documental. Gracias a técnicas de procesamiento, como microscopios de comparación, vídeos espectrales o cromatografía líquida, entre otras, hemos llegado a demostrar en varias ocasiones, que documentos aparentemente legales -que fueron mezclados con otros no dubitados-, eran en realidad añadidos y/o modificaciones de otros documentos válidos.
Realizamos igualmente cotejos de escritura manuscrita y firma, mediante técnicas grafométricas, grafológicas y grafogenéticas. Hemos participado incluso en un caso de gran repercusión nacional, en el que debíamos acreditar la legitimidad y autoría de unos escritos contables, en los que se hacía referencia a pagos en "B", de ciertas cantidades de dinero, a personajes relevantes de distinta índole.
Disponemos de un laboratorio portátil con el que podemos desplazarnos a cualquier parte de la geografía nacional, o a cualquier sede Judicial, en el caso de que sea preciso examinar la prueba "in situ", en caso de que sea imposible la extracción de los documentos originales.